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Dispensador cubre zapatos desechables para tu negocio

Debido a la pandemia de COVID-19, todos hemos tenido que cambiar nuestras costumbres, no solo en el plano personal, sino también en el laboral. En este sentido, el uso de la mascarilla y la disposición de puntos de lavado de manos mediante gel hidroalcohólico son ya básicos. Sin embargo, ciertas empresas que desarrollan su actividad en sectores como la sanidad o la producción de alimentos deben extremar las precauciones aún más. Así, contar con un dispensador cubre zapatos resulta básico para estos sectores tan sensibles.

¿Por qué es tan importante contar con un dispensador cubre zapatos  desechables?

Al no producir pelusa, no son una fuente de contaminación en sí mismos. Y su uso garantiza una total protección en las diferentes áreas en las que está dividido el establecimiento de trabajo. El riesgo de contagio es mínimo, ya que son desechables y no hay necesidad de reutilizarlos. Su goma elástica es ideal para asegurar un ajuste óptimo indistintamente de la talla de tus clientes o empleados.

En un plano más secundario, también evitan los derrapes, una situación muy peligrosa que puede motivar una caída con el riesgo de contagio que supone.

Además, como no necesita instalación, cualquier negocio que esté obligado a usar este recurso puede situar el dispositivo en un punto estratégico, que siempre suele ser la entrada a una dependencia, y olvidarse de contratar técnicos o sacar el taladro para fijarlo al suelo o a la pared.

¿En qué sectores son obligatorios los patucos desechables?

Para mantener la integridad de todos en estos tiempos de coronavirus, el uso de patucos desechables se impone en todo el ámbito clínico.

Por ejemplo, las clínicas dentales han de cumplir este requisito. En caso de que hayas visitado a tu dentista durante la pandemia y, luego, en la nueva normalidad, habrás podido comprobar que, a la entrada, se encuentra un dispensador de zapatos desechables. Esta medida, junto con el uso de mascarillas y trajes aislantes por parte de los empleados, favorece el aislamiento de patógenos si hay alguna persona contagiada en el personal o en la clientela.

Los centros de estética también han tenido que intensificar sus protocolos anticontagio. De este modo, la utilización de patucos es obligatoria. Como bien sabes, estos negocios proveen servicios en los que el contacto entre el cliente y el empleado es inevitable, pero, gracias a ciertos implementos de seguridad, se puede evitar la transmisión del virus. Además, las restricciones de aforo también son beneficiosas y facilitan la aplicación de las medidas comentadas.

Las fábricas, por ser un entorno de trabajo colectivo, han tenido que adoptar el uso de patucos con el fin de mantener a raya el virus. En estos entornos en los que trabaja una gran plantilla, es esencial que no se esparza a cada paso que se da. Con los patucos desechables, el virus, al menos, no sale de las instalaciones a través de esta vía.

En definitiva, si necesitas un dispensador cubre zapatos para tu negocio, no dudes en adquirirlo online en Divalym. Así te asegurarás de que estás haciendo todo lo posible para proteger a tus clientes y empleados en una situación tan excepcional como esta.